Escrito por Freddie Armando Romero Paredes. Hoy en dìa las comunicaciones han avanzado tanto que es imposible no tener un smartphone al lado, sea de la marca que fuese o què aplicaciones y funcionalidades tenga.
Esto a su vez ha afectado las relaciones y su proceso y desarrollo en cada espacio o entorno y con las personas propias de la familia y del trabajo cotidiano que realizamos a diario. Es decir, que las costumbres, tradiciones y ritos de la hora de la comida en la mesa e, incluso, las negociaciones propias del trabajo han cambiado la forma de ser y comportarse de las personas involucradas.
Es por eso que debemos de analizar hasta què punto o cuàl es el lìmite de alterar abruptamente la comunicaciòn con el que està a tu lado, dejando de lado la consideraciòn y el respeto hacia la otra persona y su presencia y forma de pensar, el cual impide una conversaciòn y entendimiento exitoso, pùlido y correspondido en su amplitud.
Por tanto, las empresas de telefonìa deben de promover en su responsabilidad social empresarial el valor de la conversaciòn recìproca y normalizada. De igual modo, los gobiernos y, principalmente, las escuelas deben de armar campañas de concientizaciòn de escucha activa y diàlogo limpio sin interferencias de ningùn tipo. Porque primero es la consideraciòn ante una buena comunicaciòn.
No hay comentarios:
Publicar un comentario