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jueves, 31 de diciembre de 2020

Cuando el universo fue rojo

Creado y escrito íntegramente por Freddie Armando Romero Paredes. Después de la fuga de los terrícolas tercermundistas del planeta Tierra, de la evolución de terrícolas a tritones y del pase de la Tierra a un estado y condición totalmente acuática, Petain organizó a los tritones para atacar Marte. Para ello, convocó a la Yacumama, una serpiente gigante del planeta Tierra que habita en el Amazonas y que no pudo viajar a Marte. Es entonces que Petain y los tritones viajaron montados en la Yacumama en pos de la revancha. Llegando a Marte, Petain organiza una emboscada y mata a todos los marcianos, ocasionando que al momento de la explosión la sangre de los aliens se vaya al espacio y tiña el universo de rojo. Solamente se salvaron los hijos de los marcianos y de los terrícolas tercermundistas que estaban escondidos y camuflados en la sombra de las cantutas gigantes. Punche, el tunche que vivía en Marte, no esperó mucho para avisarle a Dracon que estaba descansando en el Sol. Tal es así que Punche se subió en Tutie, el ave fénix de Twitter, y volaron hasta las afueras del Sol. Bastando con un silbido de Punche y Tutie al unísono, Dracón se despertará para volar a Marte para atacar a Petain y sus huestes de tritones, viendo que el universo está rojo por la sangre derramada en agravio de los marcianos. De esta manera, Dracón devorará a Yacumama y luego echará fuego sobre el ejército de Petain calcinándolos y abrasándolos por completo gracias al fuego divino. En cuanto a Petain, el tunche de Punche lo mareará y confundirá para que enseguida el ave fénix de Tutie dé la estocada final clavándole su cola terminada en flecha como si fuera un aguijón, terminando así con la vida del líder de los tritones. Los niños marcianos, felizmente, estaban a buen recaudo y custodiados por Pasteur, el perro alemán; Cat Max, el gato; y, Sigmund Frog, la rana ocre. Después, para quitar la sangre y el color rojo del universo, gracias a la fotosíntesis de las cantutas y a la absorción de aire de Dracón regresa el color amarillo al universo coronando el proceso de limpieza con un arco iris como símbolo de paz y comunión con Dios. Dios, al ver el gesto y la obra del ave fénix de Tutie, le invitó un níspero que la hizo dormir por un buen rato bajo el árbol. Al día siguiente, Tutie se dio cuenta que ya no era un ave con plumas, sino una mujer vestida con un vestido de brillos y luces, a quien dijo que de ahora en adelante iba a ser el hada y la musa de los niños marcianos y que a los cuales tenía que cuidar muy bien. Asimismo, le dijo que podía volver a ser un ave fénix para volar y buscar a Dracón en caso de otro ataque a Marte. Después de eso, Punche y Tutie se casaron y vivieron felices por siglos. Y colorín colorado este cuento se ha acabado. 













Punche, el tunche










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