Escrito íntegramente por Freddie Armando Romero Paredes. Hay una guerra bacteriológica entre el capitalismo de Estados Unidos  y 
la economía que rige en China, la cual quiere ser implantada por la 
misma China en el mundo. Parece que los líderes de esas dos potencias 
piensan que el mundo se controla a punta de miedo a contagios. Convivimos en una cuarentena gracias al corona virus, originada también tal vez por bombas químicas que potencias mundiales lanzan desde el aire en zonas de Medio Oriente como Alepo en vez de luchar cuerpo a cuerpo como debe de ser. A veces no sé sabe si quieren destruir el Estado Islámico o el planeta. La bomba lo que necesita para matar es nitroglicerina, pólvora, etc y no sustancias químicas que el mismo aire del planeta expande. ¿O las fuerzas armadas quieren destruir el planeta con toda la gente inocente? ¿Desde cuándo y hasta cuándo vamos a vivir así? ¿Creen que es loable tener zonas inhabitables y esteriles en Medio Oriente y otros lares del mundo que son producto de los ensayos armamentistas y pruebas bélicas? ¿A dónde creen que van los químicos, las sustancias tóxicas y las bacterias de todos los experimentos nucleares y armamentistas de las potencias mundiales al entrar en contacto con la superficie, la intemperie, las plantas, los animales y las mismas personas? Es ahí que eso sin duda nos empieza a afectar, nos cambia la vida y el mismo modus vivendi al que estamos acostumbrados. ¿Cómo se puede consumir carnes de ganado, plantas medicinales en infusión, verduras de huerto en ensaladas y guisos o respirar el aire del medio ambiente si todo eso se trastoca, se daña, se maltrata para que su estado y condición de útil quede cuestionado; y, pase a ser prácticamente un elemento inservible, cuyo mismo estado y condición malo no tiene punto de retorno? ¿No creen ustedes que el pangolín, cuyo consumo estaba tan bien recomendado por lo sabroso que era cuando se trataba de almuerzos y cenas, fue afectado por los efectos nocivos de un ambiente, un ecosistema y un clima dañado? Pasando a otro tema, cabe preguntarse ¿qué va a pasar con el turismo? y si ¿es viable y no contraproducente la actividad turística?  A veces 
como ven que en algunos países de Latinoamérica no hay tantos muertos 
como lo hay en Europa por el corona virus, quieren mandar extranjeros 
con el pretexto de ser "turistas enamorados del país y su cultura" y un 
afán de vendetta y revanchismo para que el país sufra y sepa lo que es 
tener millones de muertos como lo hay en Italia, España y Estados 
Unidos. Por eso ya verá el gobierno constitucional peruano del Presidente Martín
 Vizcarra Cornejo si abre la frontera y continúa con la no tan prometedora 
actividad turística. Si continúa con el turismo, debe establecer una 
especie de visa con algún registro sanitario para hacer el respectivo 
control de sanidad y, al mismo tiempo, tener preparado el sistema de salud
 peruano ante cualquier contingencia en caso de que vuelva a renacer con fuerza fuertes brotes de corona 
virus. Toda la vida no vamos a estar en cuarentena. Hay gente que 
necesita una vida normal. Gente que necesita trabajar, hacer gestiones, trámites, solicitar servicios, volver a la rutina laboral, volver a la vida académica. Sino ¿de qué se vive?. Parece Ben Hur de Jodá, digo Judá, y eso jode. No se puede tener a varios grupos de gente enferma, convaleciente y con riesgo de contagio en cuevas o cavernas como en la época de Jesucristo.
